El día sábado 27 de agosto, nuestro Padre y Pastor,
Héctor Eduardo Vargas Bastidas, sdb, Obispo de San José de Temuco nos convoca como comunidad educativa católica a participar de manera activa de la marcha por la vida.
Esta marcha tuvo por objetivo el señalar de manera respetuosa, que esta decisión constituye una grave ofensa a la dignidad del ser humano y en particular una agresión contra la vida del más inocente de todos los seres: el concebido y no nacido, al que la Constitución política afirma que la Ley protege. Creemos que esta decisión constituye una trágica expresión de la “cultura del descarte”, en que los excluidos son considerados desechos “sobrantes” de la sociedad, como lo llama el Papa Francisco (cfr.
Evangelii gaudium, 53 y 74)
Como comunidad educativa no podemos restarnos en tan importantes decisiones que como país nos convoca.
“No parece factible, un camino educativo para acoger a los seres débiles, afirma el Papa Francisco, si no se protege a un embrión humano. Si se pierde la sensibilidad personal y social para acoger una nueva vida, también se marchitan otras formas de acogida provechosas para la vida social»” (
Laudato Si’, 120).
El Instituto Claret siempre a favor del don más hermoso que Dios nos ha regalado, la vida.