Este año recordamos 113 años desde que el padre Mariano Avellana Lasierra partió a la casa del Padre. Mariano Avellana fue un misionero claretiano que llegó desde España para entregar su vida por los marginados de la sociedad chilena, centrando su misión en el acompañamiento  a los presos en las cárceles y en los cuidados a los enfermos en los hospitales. Recorrió desde Taltal hasta Curicó, realizando más de 700 misiones en los treinta años que estuvo en nuestro país y dedicó su vida al anuncio de la buena noticia a los pobres, viviendo una opción radical por la santidad a la que Dios nos invita siempre; “o santo, o muerto” era la frase que constantemente salía de sus labios, y aunque debía luchar a diario con su carácter, nunca dejó de mostrar a otros el rostro misericordioso de Dios. El padre Mariano murió el 14 de mayo de 1904, en un sencillo hospital de Carrizal Alto, pueblo que estaba ubicado en la Región de Atacama, pues en la actualidad ese pueblo ya no existe. En el marco de la celebración de esta fecha tan importante para nuestra congregación, tuvimos la oportunidad de recordarlo en varias actividades de la semana recién pasada. Con una hermosa liturgia, fue recordada su figura en la sede centro de nuestro establecimiento, en donde participaron los estudiantes de 3º y 4º básico. Mientras que en el campus se celebró una eucaristía en su memoria, donde participaron los estudiantes de 1º, 2º y 3º medio. Ambas celebraciones fueron presididas por el padre Gustavo Verdugo cmf, quien en su homilía invitó a los estudiantes a encontrar en la figura del padre Mariano, “el lado más humano de la santidad y el rostro más misericordioso de Dios Padre”. Por otra parte, se culminó la semana con la presentación de un stand, que nos contaba la vida y obra del Venerable padre Mariano Avellana, a través de diversos signos que fueron trascendentales para él en su vida. En esta oportunidad, los estudiantes de transición menor, transición mayor y un grupo de representantes de  nuestra Escuela Especial Claret,  asistieron junto a sus profesoras a visitar el stand, mientras que el resto de los estudiantes de enseñanza básica, tuvieron la posibilidad de acercarse durante los recreos, para conocer un poco más sobre la vida de este santo hombre.